Pensando en Petróleo, una nueva visión para Venezuela
El 19 de junio de 2013, tuvo lugar en la Universidad Católica Andrés Bello, el Foro Petróleo y Sociedad, una actividad que nos invita como venezolanos a pensar en lo que ha representado el petróleo en nuestra historia y lo que debemos aspirar que sea durante el próximo siglo. Ésta fue una iniciativa que contó con la participación de los profesores del IESA Ricardo Villasmil y Pedro Luis Rodríguez, el experto petrolero Gustavo Baquero, así como también José Ramón Medina y Leopoldo López, todos especialistas en diferentes aristas del tema.
Ricardo Villasmil, profesor de los Centros de Finanzas y Energía y Ambiente del IESA, habló sobre petróleo, volatilidad y desarrollo, desmontando diferentes mitos como la maldición del petróleo o la relación entre maldición de los recursos y subdesarrollo. Para Villasmil "no existe una maldición ni en el subdesarrollo ni en el petróleo”. Esta afirmación la sustenta con el hecho de que los países más ricos en recursos naturales, tienen un ingreso por habitante mayor y los países relativamente más ricos en recursos naturales (con respecto a su capital total), no tienen un ingreso menor. “¿Qué sucede a partir de 1973? El desarrollo comenzó a descarrilarse y aparece este intruso que es la volatilidad. Ser rico no es malo, lo malo es no saber manejar esa riqueza. Debemos evitar que la riqueza nos maneje como ha venido sucediendo”, argumentó.
Adicionalmente, Pedro Rodríguez, también profesor del CIEA del IESA, presentó su propuesta “Petróleo y progreso: una nueva relación Ciudadano - Estado – Petróleo”, en donde explica su visión de que “los países exitosos utilizan este recurso (petróleo) para crecer y le brindan herramientas a sus ciudadanos para superar las barreras como educación y salud”. Para ello es necesario establecer un entorno favorable en donde las herramientas se conviertan en progreso, comentó.
"El recurso más abundante y menos aprovechado en Venezuela es el deseo de superación de los venezolanos, este es el punto de origen del desarrollo de los países. El trabajo de los venezolanos no se ha vuelto más productivo. En la actualidad es el Estado o Gobierno de turno, es quien controla la discrecionalidad para distribuir la renta petrolera. Como consecuencia tenemos un gasto público ineficiente y poco equitativo, altos niveles de corrupción por la falta de institucionalidad, populismo y volatilidad. Esto se traduce en un modelo de dependencia por parte de los ciudadanos que hace que el petróleo sea una barrera para el progreso", aseguró. Rodríguez.
Para alcanzar esto, la propuesta del profesor se enfoca en empoderar al ciudadano en el manejo y contraloría de los recursos petroleros. Para ello considera importante la creación de un Fondo Patrimonial de los venezolanos, estabilización y ahorro, en donde la totalidad del ingreso petrolero sea dirigida primero a este fondo, garantizando al Estado el promedio de los ingresos petroleros de los últimos 5 años, y se destinaría una parte de los ingresos para gastos de corto plazo en educación y salud.
Por su parte Gustavo Baquero, afirmó que “el 20% de las reservas mundiales están en nuestro territorio; depende de los 30 millones de habitantes cómo se produce”. Baquero considera que para poder aprovechar la riqueza que tenemos, debemos derrumbar los viejos paradigmas como “el excremento del diablo” y “la maldición del petróleo” que nos han hecho tanto daño como sociedad y debemos asumir nuestra responsabilidad como país petrolero, como ciudadanos y como sociedad debemos garantizar el bienestar de las próximas generaciones. “A Venezuela le corresponde ser un país de 12 millones de barriles y no de 3. Con esas reservas, actualmente sólo tenemos 3% de la producción”.
Por su parte, José Ramón Medina presentó las oportunidades del régimen legal de petróleo en Venezuela, comenzando con la interrogante “¿Hay oportunidad de maximizar la producción bajo el marco legal vigente actualmente? Sí, el marco legal no es obstáculo para aumentar la producción, porque se pueden maximizar los ingresos y la renta del Estado, además de crear y expandir la industria nacional”, opinó Medina.
El encuentro finalizó con la ponencia de Leopoldo López, quien resaltó la importancia de superar los paradigmas que han convertido al petróleo en una maldición. Su propuesta se tituló: “Del excremento del diablo a la bendición del pueblo”, en donde explicó que el desafío es “pasar de la siembra del petróleo y asumir que ha llegado el momento de cosecharlo”. Para lograr cosechar el petróleo se debe garantizar la justicia social. “Los venezolanos hemos sido víctimas de la desigualdad. Para superar la pobreza hay que invertir en salud y educación; debe democratizarse nuestra economía, pues hay oportunidades para que los venezolanos participemos directamente y se debe abrir la posibilidad a los ciudadanos para invertir en la industria petrolera; el desarrollo tiene que ser sustentable, tenemos un compromiso con las próximas generaciones y con el medio ambiente”.
Ricardo Villasmil, profesor de los Centros de Finanzas y Energía y Ambiente del IESA, habló sobre petróleo, volatilidad y desarrollo, desmontando diferentes mitos como la maldición del petróleo o la relación entre maldición de los recursos y subdesarrollo. Para Villasmil "no existe una maldición ni en el subdesarrollo ni en el petróleo”. Esta afirmación la sustenta con el hecho de que los países más ricos en recursos naturales, tienen un ingreso por habitante mayor y los países relativamente más ricos en recursos naturales (con respecto a su capital total), no tienen un ingreso menor. “¿Qué sucede a partir de 1973? El desarrollo comenzó a descarrilarse y aparece este intruso que es la volatilidad. Ser rico no es malo, lo malo es no saber manejar esa riqueza. Debemos evitar que la riqueza nos maneje como ha venido sucediendo”, argumentó.
Adicionalmente, Pedro Rodríguez, también profesor del CIEA del IESA, presentó su propuesta “Petróleo y progreso: una nueva relación Ciudadano - Estado – Petróleo”, en donde explica su visión de que “los países exitosos utilizan este recurso (petróleo) para crecer y le brindan herramientas a sus ciudadanos para superar las barreras como educación y salud”. Para ello es necesario establecer un entorno favorable en donde las herramientas se conviertan en progreso, comentó.
"El recurso más abundante y menos aprovechado en Venezuela es el deseo de superación de los venezolanos, este es el punto de origen del desarrollo de los países. El trabajo de los venezolanos no se ha vuelto más productivo. En la actualidad es el Estado o Gobierno de turno, es quien controla la discrecionalidad para distribuir la renta petrolera. Como consecuencia tenemos un gasto público ineficiente y poco equitativo, altos niveles de corrupción por la falta de institucionalidad, populismo y volatilidad. Esto se traduce en un modelo de dependencia por parte de los ciudadanos que hace que el petróleo sea una barrera para el progreso", aseguró. Rodríguez.
Para alcanzar esto, la propuesta del profesor se enfoca en empoderar al ciudadano en el manejo y contraloría de los recursos petroleros. Para ello considera importante la creación de un Fondo Patrimonial de los venezolanos, estabilización y ahorro, en donde la totalidad del ingreso petrolero sea dirigida primero a este fondo, garantizando al Estado el promedio de los ingresos petroleros de los últimos 5 años, y se destinaría una parte de los ingresos para gastos de corto plazo en educación y salud.
Por su parte Gustavo Baquero, afirmó que “el 20% de las reservas mundiales están en nuestro territorio; depende de los 30 millones de habitantes cómo se produce”. Baquero considera que para poder aprovechar la riqueza que tenemos, debemos derrumbar los viejos paradigmas como “el excremento del diablo” y “la maldición del petróleo” que nos han hecho tanto daño como sociedad y debemos asumir nuestra responsabilidad como país petrolero, como ciudadanos y como sociedad debemos garantizar el bienestar de las próximas generaciones. “A Venezuela le corresponde ser un país de 12 millones de barriles y no de 3. Con esas reservas, actualmente sólo tenemos 3% de la producción”.
Por su parte, José Ramón Medina presentó las oportunidades del régimen legal de petróleo en Venezuela, comenzando con la interrogante “¿Hay oportunidad de maximizar la producción bajo el marco legal vigente actualmente? Sí, el marco legal no es obstáculo para aumentar la producción, porque se pueden maximizar los ingresos y la renta del Estado, además de crear y expandir la industria nacional”, opinó Medina.
El encuentro finalizó con la ponencia de Leopoldo López, quien resaltó la importancia de superar los paradigmas que han convertido al petróleo en una maldición. Su propuesta se tituló: “Del excremento del diablo a la bendición del pueblo”, en donde explicó que el desafío es “pasar de la siembra del petróleo y asumir que ha llegado el momento de cosecharlo”. Para lograr cosechar el petróleo se debe garantizar la justicia social. “Los venezolanos hemos sido víctimas de la desigualdad. Para superar la pobreza hay que invertir en salud y educación; debe democratizarse nuestra economía, pues hay oportunidades para que los venezolanos participemos directamente y se debe abrir la posibilidad a los ciudadanos para invertir en la industria petrolera; el desarrollo tiene que ser sustentable, tenemos un compromiso con las próximas generaciones y con el medio ambiente”.
