Laboratorio de misses
La belleza es parte de su cultura e incluso el bisturí es visto con buenos ojos: en 2012 se realizaron más de 250.000 operaciones estéticas en el país. “Se da en todos los estratos sociales, incluso mujeres humildes salen cada día con su mejor ropa o maquillaje”, dice Nunzia Auletta, profesora del IESA. “No es visto como vanidad, sino como un tema de autoestima, de presencia y de respeto”, agrega.
Con la entrada del Grupo Cisneros se pasó de un concurso sencillo a lo que es hoy: una escuela de misses de clase mundial. Gracias al entrenamiento salían mucho más que bellas: mujeres bien preparadas que se convertían en “estrellas”, afirma Adriana Cisneros, vicepresidenta y directora de estrategia de la Organización Cisneros. Se decidió reforzar los lineamientos de RSE en la estrategia de negocios del concurso Miss Venezuela. Con un programa de trabajo adaptado a las inquietudes de cada una de las misses y una red de ONG para diseñar iniciativas que perduren en el tiempo. “Ya no sólo importa ganar el concurso, también es relevante que exista un compromiso con la realidad venezolana” , comenta María Helena Jaén, profesora del IESA.
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