Nueve de cada diez venezolanos solo puede comprar la mitad o menos de lo necesario con el dinero que dispone según Pulso Nacional
En los últimos años, los hábitos de consumo de la población han cambiado en la misma medida en que lo ha hecho el entorno económico del país, en gran medida por el incremento de la inflación y de la escasez. La particularidad de este estudio es que no existen grandes diferencias entre lo que viven las diferentes clases sociales, pero si es notorio el cambio en la conducta de estos consumidores.
El estudio Pulso del Consumidor que realiza trimestralmente la encuestadora Datos desde el año 1969, reveló que el principal problema de los venezolanos es el desabastecimiento, desplazando al segundo y tercer lugar al alto costo de la vida e inseguridad personal, respectivamente. Estos datos se recaudaron entre abril y mayo del año en curso en una muestra de 2080 personas.
El gerente general de Datos, Luis Maturén, afirmó que nueve de cada diez venezolanos solo puede comprar la mitad o menos de lo necesario con el dinero que dispone y 42% de las personas dice que muy pocas cosas de las que necesita las puede comprar con su poder adquisitivo actual. Maturén explicó que los consumidores hoy son mucho más racionales al tomar decisiones ya que el poder adquisitivo está más ajustado.
La investigación también reveló que 85% de los encuestados destina sus ingresos al consumo de alimentos, 34% a gastos de salud familiar y 23% al consumo de productos de higiene personal. Como es de esperarse, para el consumidor venezolano es prioridad la alimentación, aunque en años anteriores se mostraba como una población cuyos intereses de consumo estaban más inclinados hacia los artículos de cuidado personal.
Disminuir el consumo fuera de casa, el entretenimiento fuera del hogar y el consumo de bebidas alcohólicas, son parte de los hábitos de consumo que el venezolano ha estado dispuesto a cambiar. “El venezolano es diferente, por lo que hay que aplicar otras estrategias de mercado”, puntualizó Maturén. Para enfrentar la crisis se debe tomar en cuenta a los colaboradores, la empatía ayuda a que estos tengan mejor disposición. Así como la flexibilidad y la adaptación son claves para encontrar las oportunidades que ayudarán a mejorar el negocio.